CENDA / 25 de Septiembre de 2020. La represión policial en Chaparina, Beni a unos 1500 marchistas hombres, mujeres y niños que participaban en la Octava Marcha en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) causó llanto, dolor e impotencia, el entonces gobierno de Evo Morales Ayma se lavó las manos. A 9 años de la brutal represión policial aún no hay sanción para los responsables de estos hechos que atentaron a los derechos de los pueblos indígenas. La represión policial, dejó más de 100 heridos y unos 200 detenidos, que fueron liberados 17 horas después, además varios niños y niñas fueron separados de sus padres y madres.